¡¡Retiren TODOS los cargos contra los estudiantes pro-palestinos!! ¡Fuera policías de los campus!

1 de mayo de 2024 – Si alguien se hace ilusiones de que Estados Unidos es un bastión de la democracia, debería acabar con ellas, de una vez por todas, este 1 de mayo. Un día antes era obvio que nadie puede expresar libremente sus opiniones, especialmente si esas opiniones van en contra de la política internacional clave de Estados Unidos. La brutal represión desatada por la policía contra los estudiantes propalestinos, desde Nueva York a Carolina del Norte, pasando por Texas y Los Ángeles, lo demostró.  

Workers World/Mundo Obrero condena en los términos más enérgicos posibles este vergonzoso despliegue de puro terror policial, llevado a cabo de forma coordinada en todo Estados Unidos al servicio de la hegemonía mundial estadounidense.  

El imperialismo estadounidense, la potencia explotadora dominante en el mundo, ha sido también el Estado policial número uno. A menudo, los principales brazos domésticos del Estado -la policía local y estatal- han llevado a cabo su brutalidad en situaciones aisladas. Los abusos policiales, si es que se denuncian, son distorsionados por los medios de comunicación corporativos, especialmente si se perpetran contra los pueblos negros, morenos e indígenas.

Esto sólo cambia si estalla una rebelión. Recordemos mayo de 2020, tras el linchamiento policial público de George Floyd en Minneapolis, que rompió la censura de los asesinatos policiales.

Ahora avanza rápido hasta abril de 2024. Otro tipo de erupción ha cogido por sorpresa a los gobernantes estadounidenses y ha conmocionado a la sociedad. Se trata de la explosión de un movimiento mundial de solidaridad con el pueblo palestino, especialmente con los que viven en la Gaza ocupada, que desde el 7 de octubre sufren un genocidio de proporciones épicas a manos del Estado de apartheid israelí respaldado por Estados Unidos.  

Dentro de Estados Unidos, este movimiento de solidaridad se ha elevado a un nuevo nivel gracias a los estudiantes universitarios de más de 100 campus, cuya determinación ha erigido Campamentos de Solidaridad con Gaza. Estas acciones exigen que las fundaciones universitarias desinviertan de Israel y de las empresas vinculadas a Israel y que Israel ponga fin al genocidio. Estos son los dos lemas políticos comunes de todos los campamentos.

Cabe destacar que los estudiantes estadounidenses se ganaron el aprecio del pueblo palestino y del resto de las masas de toda Asia Occidental, la región a menudo llamada Oriente Próximo.

Policía desatada

En la ciudad de Nueva York, la policía, siguiendo órdenes de las autoridades universitarias y del gobierno municipal, reunió una fuerza abrumadora y atacó a los estudiantes de la Universidad de Columbia -la zona cero, el primero de los campamentos- y del City College de Nueva York (CCNY).

Policías con equipo antidisturbios empujaron al suelo y bajaron escaleras a estudiantes desarmados, los golpearon con bastones, lanzaron granadas de estruendo, sacaron pistolas, los rociaron con gas lacrimógeno y pimienta antes de detenerlos y les ataron las manos a la espalda. Los policías detuvieron a unos 300 estudiantes. La administración de Columbia ha pedido públicamente al Departamento de Policía de Nueva York que ocupe el campus de Columbia hasta el 17 de mayo.  

Agresiones brutales similares tuvieron lugar en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), la Universidad de Texas en Austin, la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill y otros campus de todo el país.

En la UCLA, unas 200 personas identificadas como sionistas -y con aspecto de elementos fascistas- utilizaron fuegos artificiales, mazas y palos contra el campamento mientras los estudiantes dormían. La policía, por lo demás omnipresente, convenientemente no se encontraba en ninguna parte durante estos ataques, permitiendo a estos fascistas hacer el trabajo sucio de la policía.  

El ataque de UCLA evocó cómo la policía en los EE.UU. ha colaborado con sus cómplices terroristas extra-legales, el Ku Klux Klan y las fuerzas de tipo nazi (como lo hicieron en el verano de 2020). De manera similar, las Fuerzas de Ocupación israelíes dan respaldo militar para que colonos armados ataquen aldeas palestinas en Cisjordania.

En UCLA, los sionistas gritaron “¡segunda Nakba!” a los estudiantes mientras atacaban. Se trata de una referencia flagrante a la primera Nakba de 1948: el desplazamiento masivo de palestinos provocado por auténticas masacres en las aldeas de los indígenas. El desplazamiento condujo a la creación de Israel en tierras arrebatadas a los palestinos desplazados y asesinados.  

La lucha no descansará

Los estudiantes de la Universidad de Fordham, en Nueva York, instalaron un campamento cubierto el 1 de mayo. La policía los amenazó inmediatamente con detenerlos y cubrió las ventanas donde los estudiantes habían colocado carteles. Después de que estos estudiantes recibieran cartas de suspensión de la universidad, escribieron “Palestina libre” en las cartas mientras coreaban “¡Divulga, desinvierte, no pararemos, no descansaremos!”.

Indignados por la violencia policial, miembros del profesorado -varios de los cuales también han sido agredidos y detenidos- han convocado un paro en la City University of New York (CUNY) el 2 de mayo en solidaridad con los estudiantes. Esto significa que se cancelarán muchas clases en todo el sistema CUNY.

Y la solidaridad no se limitó al mundo académico.

El presidente de United Auto Workers, Shawn Fain, emitió la siguiente declaración el Primero de Mayo: “La UAW nunca apoyará las detenciones masivas ni la intimidación de quienes ejercen su derecho a protestar, hacer huelga o denunciar la injusticia. Nuestro sindicato lleva seis meses pidiendo un alto el fuego. Esta guerra está mal y esta respuesta contra estudiantes y trabajadores académicos, muchos de ellos miembros de la UAW, está mal. Hacemos un llamamiento a los poderes fácticos para que liberen a los estudiantes y empleados que han sido detenidos y, si no pueden soportar el clamor, dejen de apoyar esta guerra.”

Workers World/Mundo Obrero se une a estudiantes, trabajadores y sindicatos para exigir: “Liberar a los estudiantes y trabajadores cuya inquebrantable solidaridad con el pueblo palestino y su resistencia no descansará, no importa la represión y no importa el tiempo mientras persista el genocidio.”

Esta heroica Intifada estudiantil, que ha llegado a todos los rincones del planeta, ha inspirado al mundo a no descansar hasta que Palestina esté libre de todo vestigio de colonialismo de colonos, supremacía blanca y ocupación por parte de sus patrocinadores imperialistas, especialmente Estados Unidos y sus aliados imperialistas.

Del río al mar, ¡Palestina será libre!  En solidaridad, ¡TODOS somos palestinos!  ¡Abajo el imperialismo en todas partes!