Fuerzas de clase detras del asesinato de Jordan Neely

Debido a la lucha de masas, Daniel Penny, blanco y ex marine, cuyo estrangulamiento de 15 minutos de duración provocó la muerte de Jordan Neely, un afroamericano de 30 años sin hogar y con un enfermo mental, fue acusado de homicidio involuntario en segundo grado. Si es declarado culpable, y ese es un SI muy grande, podría enfrentar entre 5 y 15 años de prisión. Penny tenía al menos dos cómplices que sujetaban los brazos y las piernas de Neely mientras lo asfixiaban lentamente; los dos no han sido acusados.

Cuando Penny fue llevado para ser interrogado por el Departamento de Policía de Nueva York el 1 de mayo, el día en que ocurrió el asesinato en un tren subterráneo F, fue puesto en libertad sin cargos.

A partir del 2 de mayo, se produjeron manifestaciones espontáneas y planificadas durante días, incluida una que bloqueó una vía del metro, exigiendo que se cobrara a Penny. Esa demanda no se cumplió hasta el 12 de mayo, cuando Penny se entregó después de que el fiscal de distrito anunciara los cargos de homicidio involuntario. La familia de Jordan Neely y sus abogados, aunque dijeron que estaban “satisfechos” con los cargos, habían pedido que se acusara a Penny de asesinato en segundo grado, lo que habría significado una sentencia más severa si fuera declarada culpable.

Penny fue liberado inmediatamente con una fianza de $100,000. ¿Cómo se recaudó una suma tan grande tan rápido? Un sitio de recaudación de fondos basado en la  supremacía blanca, bajo la apariencia de ser cristiano GiveSendGo, ha recaudado más  de $1 millón hasta la fecha para apoyar los gastos legales de Penny. La recaudación de fondos fue organizada por sus abogados; dentro de las 24 horas posteriores a la acusación de Penny, se recaudaron $600,000 para su defensa.

Este mismo sitio recaudó cientos de miles de dólares para el supremacista blanco Kyle Rittenhouse, quien mató a dos manifestantes antirracistas de Black Lives Matter en Wisconsin en 2020; los acusados pro-Trump de los disturbios del Capitolio de EE.UU. del 6 de enero de 2021; y el llamado “Convoy de la libertad”, un grupo de camioneros en Ottawa, Ontario, Canadá, que en 2022 protestó por una regla que exige que los conductores transfronterizos se vacunen. 

Republicanos de extrema derecha como el gobernador de Florida Ron De Santis, la representante de Georgia Marjorie Taylor Greene, el propietario de Twitter y multimillonario Elon Musk y los expertos de Fox News elogiaron a Penny por el asesinato. Sus comentarios que condonan la muerte de Neely son demasiado repugnantes para mencionarlos aquí. 

Una vez más, el personaje de la víctima, en este caso Jordan Neely, un hombre sin hogar, hambriento,  desesperado y enfermo mental, que resultó ser negro, está siendo juzgado en público. Los abogados de Penny utilizarán la difamación como principal defensa para justificar este asesinato por parte de un justiciero blanco. 

Y este tipo de reacción atroz no está aislada de un solo individuo. Es parte de una guerra racista justificar tales asesinatos por parte de la policía y vigilantes racistas como Penny demonizando a las víctimas, especialmente a los jóvenes negros como Neely, Ahmaud Arbery en Georgia, Trayvon Martin en Florida e incluso Tamir Rice, de 12 años en Ohio, quienes fueron etiquetados falsa y cruelmente como un peligro y una amenaza para la sociedad.

Y el hecho de que un sector de la clase dominante apoye las acciones de Penny ilustra que tiene mucho apoyo de las grandes empresas para intentar exonerarlo de este terrible crimen. Esta es otra razón por la cual una lucha unida de clases políticas debe abolir este horrendo sistema capitalista, para garantizar todas las necesidades humanas que los Jordan Neelys del mundo claman y merecen.