El mes de marzo fue testigo de una serie de manifestaciones en toda América del Norte en solidaridad con las luchas del pueblo trabajador de Haití por la justicia, la democracia y el fin de la injerencia de Estados Unidos en sus asuntos internos.
Los miembros de la diáspora haitiana, junto con sus aliados internacionales, celebraron concentraciones en ciudades como Nueva York, Boston, Washington, D.C., Atlanta, Miami, San Juan de Puerto Rico, Montreal y Ottawa (Canadá), en solidaridad con el levantamiento en curso en Haití.
La Alianza Negra por la Paz (BAP, siglas en ingles,) celebró protestas en todo Estados Unidos los días 28 y 29 de marzo en coordinación con las enormes protestas que tuvieron lugar en Puerto Príncipe y en todo Haití en esos días. (Véase el vídeo de Twitter vinculado a @Blacks4Peace).
La manifestación de Washington, D.C., fue en frent al Departamento de Estado, que fue llamado por BAP como “instrumental en la difusión de información errónea y la manipulación de las elecciones de Haití con el fin de mantener los regímenes de derecha en el cargo en Haití”.
La concentración de Chicago se celebró frente al Consulado de Haití. En una declaración de apoyo, el BAP subrayó que actuaba en solidaridad con las masas haitianas. Haití es “la primera república negra que ha luchado durante décadas contra el dominio supremacista blanco de Estados Unidos”.
En la ciudad de Nueva York, Komokoda (Comité para la Movilización contra la Dictadura en Haití) se unió al BAP para celebrar una militante y animada manifestación en la ONU, justo enfrente de la Misión de Estados Unidos. Los oradores, tanto en criollo como en inglés, denunciaron que Jovenel Moïse es un presidente impuesto por Estados Unidos que está maniobrando para convertirse en un dictador. Un orador condenó a Estados Unidos, la ONU, la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea y el Grupo Central por interferir en los asuntos internos de Haití. El Grupo Central está compuesto por los embajadores de Francia, Alemania, España, Brasil, Canadá, Estados Unidos, la Unión Europea y representantes especiales de la OEA y la ONU.
Algunos oradores en la manifestación de Nueva York llamaron a una revolución; otros condenaron los ataques a las mujeres y los abusos de Estados Unidos contra los refugiados.
En Puerto Rico, Comuna Caribe y otros grupos progresistas puertorriqueños se manifestaron frente al Edificio Federal de Estados Unidos en San Juan en solidaridad con el pueblo haitiano y para exigir que “la ONU y la OEA saquen sus manos de Haití”. (Twitter @AgencyINS)
Unos días antes, una coalición de grupos progresistas de San Francisco se unió al Comité de Acción por Haití para celebrar un Día de Solidaridad con Haití el 18 de marzo. (tinyurl.com/vnm9vd6c)
Solidarité Québec-Haïti celebró el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial el 20 de marzo organizando una manifestación ante la oficina del Ministro de Asuntos Exteriores para denunciar el apoyo de Canadá a la dictadura de Jovenel Moïse.(tinyurl.com/kcnwwxza)
WW PHOTO: G. Dunkel
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