Trump, el capitalismo incitan tiroteos masivos

Entre el 31 de julio y el 3 de agosto, tres terroristas hombres de raza con blanca mataron e hirieron a docenas de personas en Gilroy, California; El Paso, Texas; y Dayton, Ohio. Tres tiroteos masivos en los Estados Unidos en una semana.

Los locutores de televisión expresaron que esto llevó el número de tiroteos masivos de EE.UU. en 2019 a más de 250. Wikipedia y artículos de noticias en todas partes publicaron relatos completos o parciales de los crímenes atroces.

Sin embargo, en ninguna parte de los medios de las grandes empresas se mencionó la abrumadora razón de los asesinatos. No es “falta de control de armas”. No es “enfermedad mental”.

Pero el hecho es que EE.UU., todas sus instituciones formales y su “estado de derecho” están profundamente arraigadas en los fundamentos de la supremacía blanca, la xenofobia, la misoginia, el nacionalismo cristiano y el odio anti-LGBTQ2S+ y un sistema de capitalismo asesino.

Esos odios alentados y practicados causaron un terrible precio la semana pasada.

Justo antes del asalto en Gilroy, el asesino entró en Instagram para recomendar un libro glorificado por los supremacistas blancos y solía justificar el racismo, la esclavitud y el colonialismo. Luego salió y asesinó a una persona afroamericana y dos niños latinx, de 6 y 13 años, e hirió a muchos otros.

El tirador de El Paso publicó un largo manifiesto, comenzando con una declaración de que su ataque fue “una respuesta a la invasión hispana de Texas”. Luego condujo nueve horas a través de Texas (que era indiscutiblemente parte de México hasta que Estados Unidos lo robó en 1848) a la zona predominantemente latina de El Paso, justo al otro lado de la frontera con Juárez, México. Allí disparó y mató a 22 personas e hirió al menos a 26 más, muchas de ellas de gravedad.

Las identificaciones de los asesinados no están completas, pero al menos seis ciudadanos mexicanos murieron, según su embajada, así como el ex conductor de autobuses urbanos de 72 años Arturo Benavides y el estudiante de secundaria de 15 años, Javier Rodríguez. También se informó que algunos de los heridos no fueron a los hospitales por temor al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU. Es posible que otros, por la misma razón, no fueron a la morgue para identificar a sus seres queridos.

Todavía no ha surgido información sobre la ideología del asesino de Dayton. Pero la identidad de sus víctimas expuso brutalmente sus odios. Las nueve personas a las que disparó incluyeron a su hermano de 22 años, que era un hombre trans, y seis hombres y mujeres afroamericanos que estaban cerca.

Después de las masacres, Trump tuiteó los obligatorios “pensamientos y oraciones”. Pero su función real como el principal abanderado gubernamental del odio de dividir y conquistar se exhibe constantemente.

En un mitin en Florida el 19 de mayo, se lamentó de que los agentes de la Patrulla Fronteriza no tengan permitido apuntar con sus armas a los in/migrantes y preguntó: “¿Cómo se detiene a estas personas?” Cuando alguien en la multitud gritó: “Dispárales” y el hizo una “broma” de eso.

Nuestra pregunta es: ¿Cómo lo detenemos? ¿Y los asesinos racistas, los asesinos antisemitas y antiislámicos, los asesinos de migrantes, los que matan a personas queer y trans, los que matan en incidentes de violencia doméstica?

Según un análisis de Everytown for Gun Safety, de 156 tiroteos masivos entre 2009 y 2016, el 54 por ciento estaban relacionados con violencia doméstica o familiar. (tinyurl.com/y5oyujxa). 

Nueve personas afroamericanas fueron asesinadas a tiros en una iglesia de Charleston, SC, en 2015. Cincuenta personas en su mayoría latinx, principalmente LGBTQ2S + fueron asesinadas en un club nocturno de Orlando, Florida, en 2016. Once personas fueron baleadas a muerte en una sinagoga de Pittsburgh en 2018. Y así sucesivamente.

Este es el sistema estadounidense profundamente asesino en el que vivimos. Y esas son solo algunas de las muertes por disparos masivos aquí. Eso no cuenta los millones que EE.UU. a matado en sus guerras.

¿Qué se necesitará para terminar esto?

Los elementos más moderados en el Partido Demócrata son demasiado tímidos para siquiera acusar a Trump. Los progresistas sin éxito propusieron un juicio político por racismo después de sus violentos tuits contra cuatro congresistas de color.

Pero la acusación por sí sola no haría justicia a las víctimas de estas horribles masacres. Las formalidades legales ahora supuestamente impiden el arresto de un presidente en funciones. ¡Pero el asesinato es asesinato! La creciente ola de resistencia contra la supremacía blanca en los Estados Unidos quiere ver a Trump ante la justicia.

¿Por qué miraríamos hacia el Partido Demócrata para salvarnos? Mire la historia de los EE.UU. Nada ha movido a los partidos gobernantes en el poder, sea cual sea su nombre, excepto la movilización masiva independiente del pueblo. ¡Vamos a acusar al sistema capitalista en su lugar!

La pregunta ya no es la hipotética: “¿Qué pasaría si vinieran por (llene el espacio en blanco)?” Las masacres subrayan la verdad de los manifestantes judíos anti-ICE han proclamado: “¡Nunca Más es Ahora!” Ahora es el momento de organizarse y estar en las calles para exigir que se detengan los ataques mortales contra los negros y morenos y los migrantes/inmigrantes, y la retórica llena de odio que los inspira.

Cada acción en solidaridad con la gente de color y con los inmigrantes es importante, no importa cuán pequeña sea. Use un botón que diga: “Vamos contra el racismo” y fortalezca a todos los que encuentre. Organice una reunión de la ciudad o una reunión en el vecindario en apoyo de los migrantes/inmigrantes y cree un lugar para que se reúnan los antirracistas.

Lleguemos a aquellos con quienes trabajamos, a miembros de nuestro sindicato y otros sindicatos, a nuestros grupos de vecindario y comunidad, y formemos coaliciones para defender a los inmigrantes en nuestras vidas.

Esté atento a las acciones locales de FIRE (Fight for Im/migrants and Refugees Everywhere) y únase. (Facebook.com/fightformigrants/) Siga la Red Internacional de Solidaridad de los Trabajadores (Workersolidarity.net) que está creando conciencia y colectividad de la clase trabajadora. ¡Hagamos del Día del Trabajo 2019 un día de solidaridad con los in/migrantes!

Si ahora encontramos nuestra fuerza juntos, ese es otro paso para romper el control sangriento de la opresión, para terminar con los asesinatos causados por el capitalismo patriarcal, supremacista blanco. Podemos comenzar a construir el largo pero esperanzador camino hacia el socialismo revolucionario donde “la tierra se levantará sobre nuevas bases”.

“La Solidaridad para Siempre” comienza con la solidaridad hoy.