El calentamiento global, Trump y China
El año 2016 que acaba de terminar fue el más caliente registrado. Así fue 2015. Y 2014 anteriormente. Cada año, nuevos récords mundiales se establecen al cubrir la atmósfera una capa de CO2 causada por la quema de combustibles fósiles, calentando el planeta más rápidamente de lo que los científicos habían predicho. En EUA, el calor del año pasado fue superado sólo por el año récord de 2012.
Entonces, ¿qué están haciendo las autoridades en el país más rico de la tierra sobre esta crisis monumental? Bueno, han conseguido que uno de sus compañeros derechistas multimillonarios sea elegido presidente, y él ha escogido un gabinete donde abundan los negadores climáticos – muy convenientemente, dadas sus conexiones con las industrias del carbón y del petróleo.
Ahí está Rex Tillerson, el presidente saliente de ExxonMobil, selecto por Trump para Secretario de Estado. Rick Perry, un ex gobernador de la Texas rica en petróleo, para Secretario de Energía. Y Scott Pruitt, un ex fiscal general de Oklahoma que ha estado librando una batalla legal contra el Plan de Energía Limpia de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) que reduciría las emisiones de gases de efecto invernadero de las centrales eléctricas de carbón. ¿Qué puesto ocupará Pruitt? Por supuesto – la EPA.
Científicos, ambientalistas y la gente que piensa en el futuro se están halando de los pelos. ¿Qué pueden hacer?
La respuesta: Luchar desesperadamente contra este sistema podrido que está destruyendo el mundo. Ayudar a construir un movimiento de masas revolucionario contra el capitalismo y sus males, desde el racismo, el sexismo y la opresión de la comunidad LGBTT, a la explotación de todas/os los trabajadores y la destrucción del medio ambiente – todo con fines de lucro.
China invertirá $360 mil millones en energía renovable
Es instructivo observar lo que China está haciendo con respecto al cambio climático. Sigue siendo un país en desarrollo, que necesita alimentar y albergar a 1.300 millones de personas en la misma superficie de tierra que EUA.
Sin embargo, la Administración Nacional de Energía de China anunció el 5 de enero que el país gastará otros 360.000 millones de dólares – más de un tercio de un billón de dólares – en fuentes de energía renovable como la solar y la eólica para 2020. China ya es el mayor productor de paneles solares del mundo.
Ambientalistas de todo el mundo están saludando esta decisión, señalando que cuando el gobierno chino hace tal anuncio, no es sólo una promesa vacía, un truco político o una lista de deseos. Esto significa que los planificadores económicos ya han sentado las bases y detallado cómo financiar un proyecto tan grande y desarrollar la infraestructura para llevar la energía donde se necesita.
Al mismo tiempo, China está en medio de una gran campaña para reducir sus industrias de carbón, acero y cemento. Se llama reforma estructural de la oferta. Luego de varias décadas de rápida industrialización, la tasa de crecimiento chino ha disminuido en los últimos años.
La industrialización trajo contaminación. Y ahora hay excedente de viviendas en algunas áreas, así como de materiales básicos como acero y cemento. Las mejoras tecnológicas también han hecho que algunas industrias se vuelvan redundantes.
En un sociedad capitalista como EUA, la redundancia de fuerzas productivas causa que los grandes inversores simplemente se alejen del problema, dejando áreas desindustrializadas. Y algunos de los asesores del mundo capitalista que impulsan más reformas de mercado en China, les han instado a hacer precisamente eso, especialmente porque las industrias involucradas son predominantemente empresas estatales.
¿Qué pasa con los mineros? ¿Los trabajadores del acero? Dejen de pensar en ellos. Dejen que el mercado lo ordene todo.
Pero aparece que el Partido Comunista y el gobierno chino no siguen estos consejos. Bajo la reforma estructural de la oferta, las industrias redundantes se están cerrando bajo un plan — sí, su sistema permite un plan integral de desarrollo económico — en la que todo el peso del gobierno insiste que haya formación laboral y un ingreso para todas/os los trabajadores afectados hasta que obtengan otro empleo. Al mismo tiempo, el plan general es crear nuevas industrias — como la inversión estatal en energía solar y eólica que abrirá 13 millones de empleos.
Es posible reorganizar la vida humana y la actividad económica para ser sustentable en este hermoso y único planeta.