Solidaridad desde EUA, Berta Cáceres, ¡PRESENTE!
El International Action Center-Centro de Acción Internacional (IAC-CAI) se une en solidaridad a la familia de la compañera Berta Cáceres, a las y los miembros de su organización COPINH, a la nación Lenca y al resto del pueblo hondureño que hoy llora su trágica partida.
El legado de Berta hace reforzar el ánimo de resistencia a pesar de las peores condiciones a que se vea sometida la/el activista que lucha por un mundo mejor y más justo. Al ver su lucha incesante contra multinacionales, bancos y el estado hondureño, el cual mantiene una política de impunidad y represión, esa lucha se convierte en una lección y un ejemplo a seguir a nivel internacional.
Su muerte ha multiplicado las Bertas del mundo. Hoy todas y todos somos Berta Cáceres.
Al estar basado en los Estados Unidos, el IAC-CAI asume el reto de exponer y redoblar los esfuerzos para que este país, promotor del golpe del 2009 que derrocó al presidente legítimo Manuel Zelaya, país mantenedor de las políticas represoras bajo agencias como la USAID y un gran aparato militar, responda por su participación directa o indirecta en este horrendo crimen.
Las y los miembros del IAC-CAI perseveraremos en esta tarea a la vez que seguimos nuestra lucha dentro del criminal monstruo en contra del racismo, el sexismo y en general, contra la opresión capitalista que agiganta la brecha entre ricos y pobres.
Condenamos este asesinato y exigimos del estado hondureño que se castigue con todas las fuerzas de la ley, no sólo a los perpetradores de tan espantoso acto, sino a los agentes intelectuales a beneficio de los cuales se ha consumado la muerte de Berta Cáceres.
Asimismo, exigimos al gobierno de los Estados Unidos a cesar y desistir de intervenir en Honduras y en los otros países de la región y del mundo. Las condiciones del pueblo indígena, negro, latino e incluso de la clase trabajadora blanca en Estados Unidos se va deteriorando a pasos agigantados. El terrorismo policial, que el año pasado cobró la vida de más de 1.000 personas en este país, se ha convertido en una epidemia. Solucionar esta crisis es lo que el gobierno estadounidense debe atender, no crear más crisis a nivel internacional.
Exigimos además del gobierno estadounidense, que se abstenga de ayudar a encubrir a los verdaderos actores del crimen de Berta Cáceres, y de dar refugio a sus asesinos como ya tienen por costumbre, citando un ejemplo, el amparo del criminal Posada Carriles.
¡Berta Cáceres, ¡PRESENTE!
¡Viva la lucha del pueblo hondureño!