¡WW/MO saluda a las mujeres en la lucha!

Editorial 8 de marzo de 2014

El 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Este día especial rinde homenaje a las luchas de las mujeres contra la guerra, la opresión y la desigualdad. También es un momento para promover la verdadera solidaridad internacional, para abrazar a las mujeres de todos los continentes.

Este año hemos visto a mujeres luchando contra los estragos de la globalización corporativa en todos los continentes. Ya sea que trabajen en fábricas de Indonesia, o de textiles en Bangladesh, en el sector público de Grecia, en fábricas de vestido en Haití o en los campos agrícolas de Brasil, las mujeres están exigiendo sus derechos.

Vemos la oposición a las interminables intervenciones de Estados Unidos, que tienen como objetivo instalar o apuntalar regímenes pro estadounidenses para aprovecharse de los recursos que le pertenecen legítimamente a sus habitantes. La crisis económica está impulsando más agresividad aún en el exterior. Sin embargo, esto no pasa sin oposición. Desde las Filipinas hasta Pakistán, desde Somalia a Honduras, las mujeres desafían los golpes de estados laborados por Estados Unidos, sus bases, sus tropas y sus armas.

Es el capitalismo, un sistema basado en la propiedad privada de los bienes, que está en el centro de la opresión de las mujeres y otras formas de discriminación, la desigualdad y la intolerancia. Los capitalistas súper ricos devoran la inmensa mayoría de la riqueza del mundo. Explotan la labor de las/os trabajadores, quedándose con las ganancias que ellas/os producen mientras les pagan salarios bajos.

La desigualdad económica y social es inherente dentro de este sistema. Los ricos se están haciendo más ricos y las/os trabajadores más pobres. A escala mundial se está ampliando la brecha de ingresos. Durante esta llamada “recuperación”, las ganancias están aumentando enormemente mientras la clase obrera multinacional se va quedando atrás. Esto afecta gravemente a las mujeres.

Los capitalistas globales pagan los salarios más bajos posibles en fábricas y talleres donde trabajan millones de mujeres. Las mujeres y las niñas son el 70 por ciento de las personas más pobres del mundo. La crisis económica ha empeorado sus condiciones. Ochenta y un millón están desempleadas. Millones tienen empleos a tiempo parcial y de bajos salarios. Millones tienen que emigrar para encontrar puestos de trabajo y entonces se enfrentan al racismo, la intolerancia y el maltrato.

Incluso en los Estados Unidos, el país “más rico” del mundo, las mujeres no tienen equidad de remuneración; aquellas que son afroamericanas y latinas están entre las trabajadoras peor pagadas. Las mujeres tienen dos tercios de los empleos de salario mínimo (o menos). Sin embargo, las mujeres que trabajan en establecimientos de comida rápida y otros trabajos mal pagados están saliendo a protestar y están luchando, dando un impulso a todos los trabajadores y a las fuerzas progresistas.

Saludamos a todas las mujeres que luchan en el mundo, desde las que se oponen a la guerra y la ocupación imperialista, hasta las que desafían a las corporaciones globales. Saludamos a las que marchan contra la austeridad impuesta por las instituciones financieras europeas y estadounidenses y por sus propios gobiernos.

Extendemos nuestra solidaridad a nuestras hermanas en todo el mundo y a las trabajadoras aquí—organizadas y no organizadas– que están exigiendo puestos de trabajo, buenos salarios y condiciones humanas de trabajo.

Las mujeres siempre han luchado contra la opresión y la explotación. Por eso es que el Día Internacional de la Mujer fue fundado en 1910 – para reconocer sus luchas, así como para construir la solidaridad global. También fue la intención de sus fundadoras socialistas, el promover la lucha anticapitalista para allanar el camino hacia un mundo mejor. n