Venezuela lucha contra los criminales corporativos de Exxon
El gobierno venezolano ha prometido que los recientes intentos por parte de la
compañía petrolera más grande del mundo, ExxonMobil, de robar
los bienes que pertenecen al pueblo venezolano, van a encontrarse con una dura
resistencia.
ExxonMobil ha estado cabildeando en las cortes imperialistas de los EEUU y
Europa para congelar los bienes en el exterior de la compañía estatal
de petróleo de Venezuela, PDVSA. El 8 de febrero, cortes en el Reino Unido
y en los Países Bajos emitieron medidas provisionales judiciales que, en
espera de apelaciones, congelarían aproximadamente $12 mil millones en
bienes de la PDVSA en Europa. Una decisión judicial en los EEUU será
vista por una corte federal en Manhattan el 13 de febrero.
Las decisiones de las cortes son un robo con sello legal. Las cortes que
emitieron estas decisiones son parte del Centro Internacional para el Arreglo
de Disputas sobre Inversiones (ICSID por las siglas en inglés). El ICSID
está controlado por el Banco Mundial. Opera como un grupo de tribunales
ilegales, establecidos para emitir decretos que favorecen a las corporaciones e
instituciones bancarias trasnacionales. El Banco Mundial está ayudando a
ExxonMobil en el intento de robar bienes con un valor de miles de millones de
dólares al pueblo venezolano.
En una declaración radial el 10 de febrero, el presidente de Venezuela,
Hugo Chávez respondió a los recientes fallos de la corte diciendo:
“Me dirijo al imperio estadounidense, porque es él quien manda: siga
así y verá que no enviamos ni una sola gota de petróleo al
imperio de los EEUU”.
El contraste entre ExxonMobil y PDVSA no podía ser más marcado.
ExxonMobil es una corporación sanguinaria que ha dejado muerte y
destrucción del medio ambiente desde Irak hasta Nigeria, pasando por
Indonesia y Valdez, en Alaska. Desde derramamientos masivos de petróleo
que han destruido ecosistemas enteros, hasta guerras criminales por
petróleo que han destruido países enteros, la ExxonMobil ha ganado
fama como el epítome de malversación corporativa y por su brutalidad.
Muchos de los miles y miles de millones de dólares en ganancias anuales de
Exxon son utilizados para enriquecer aún más a los ejecutivos
corporativos y a sus accionistas ric@s.
Contrariamente, PDVSA es propiedad del pueblo venezolano quien la maneja para
el beneficio del pueblo venezolano. En 2007, más de $13.3 miles de
millones de dólares en ingresos de PDVSA fueron encaminados hacia gastos
sociales en Venezuela.
El dinero creado por PDVSA es utilizado para pagar doctor@s y servicios de
cuidado de salud, programas de alimentos y nutrición, escuelas y maestr@s,
y muchos otros programas sociales en Venezuela. Una de las contribuciones
más grandes de PDVSA a la sociedad venezolana ha sido su trabajo en el
desarrollo de sistemas de agua potable por todo el país, que ahora traen
agua a casas que anteriormente no tenían acceso.
L@s trabajador@s de PDVSA desempeñan un papel activo en organizar los
proyectos sociales de PDVSA. A través de su participación en lo que
se conoce como los consejos de trabajador@s, los trabajador@s de PDVSA deciden
cuál es la mejor manera de asignar los ingresos de PDVSA para satisfacer
las necesidades de sus propias comunidades.
El intento de ExxonMobil de robar los bienes de PDVSA es sólo la
acción criminal más reciente en una larga serie de ataques llevados a
cabo por las fuerzas del imperialismo contra el pueblo de Venezuela. Encabezado
por los Estados Unidos los poderes imperialistas han tratado cada táctica
posible para intentar desestabilizar la Revolución Bolivariana. Desde el
sabotaje económico hasta la organización de protestas estudiantiles
lideradas por l@s hij@s de la vieja oligarquía, y hasta el robo directo de
recursos, los poderes imperialistas han utilizado todos los instrumentos
disponibles.
Pero hasta ahora los esfuerzos de los imperialistas por descarrilar el
“proceso” que así llaman l@s venezolan@s la
transformación revolucionaria de la sociedad venezolana de capitalismo a
socialismo — no han sido exitosos. El proceso sigue desarrollándose
mientras el pueblo venezolano valientemente se enfrenta a los ataques
criminales perpetrados contra él.
A medida que el pueblo venezolano continúa la lucha contra el imperio
estadounidense, es imperativo que l@s trabajador@s aquí en los Estados
Unidos, y por todo el mundo, se unan en solidaridad con sus hermanas y hermanos
venzolan@s, y a su valiente lucha contra el imperialismo.
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